El CEST pide que se agilicen las ayudas para evitar que miles de empresas desaparezcan en los próximos meses.

Los empresarios esperan que las medidas anunciadas por el Gobierno canario sean las que esperan y necesitan quienes no pueden hacer frente a sus obligaciones a raíz de las limitaciones de horarios, aforos y actividades. 

Las empresas y los autónomos cuya actividad ha reducido o limitado la administración siguen sin recibir las ayudas anunciadas desde hace meses. Así lo ha denunciado el Círculo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST), desde donde se reclama al Gobierno de Canarias que las líneas de ayudas —en las que el Ejecutivo está trabajando— contribuyan de forma verdaderamente efectiva a evitar el cierre de cientos de empresas con el consiguiente despido de miles de trabajadores. “O llegan las ayudas o en los próximos meses se acelerarán los cierres y concursos de acreedores, sin posibilidad de recuperarlas o rescatarlas, a miles de empresas y en consecuencia decenas de miles de puestos de trabajo”, ha afirmado el presidente del CEST, Roberto Ucelay. 

Empresarios y profesionales esperan que desde el Gobierno regional se concreten cuanto antes las ayudas y medidas de ayuda que hacen falta para dar respuesta a la situación agónica que están viviendo desde hace meses quienes han visto su actividad reducida o detenida a raíz de las restricciones sanitarias y del cero turístico provocado por la COVID-19.

En este sentido, el Círculo de Empresarios del Sur espera que el paquete de medidas que el Ejecutivo autonómico dará a conocer en los próximos días, con el compromiso de concretarlas antes que final de mes, entre otras líneas de actuación ofrezca soluciones a las empresas y profesionales que, sin haber recibido ayudas desde el 15 de marzo de 2020, siguen abonando las tasas de basura, el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), arrendamientos o, entre otros pagos, el seguro social del personal acogido a los ERTE y otros pagos.

A juicio del CEST, empresas y profesionales sin apenas ingresos por las restricciones impuestas a sus actividades económicas —con limitaciones horarias y de aforo— difícilmente podrán mantenerse abiertas hasta que en los meses de verano la ocupación turística comience a repuntar. El Círculo del Sur entiende que empresas que tienen en la restauración, en el el ocio, las excursiones, el comercio, gimnasios o parques temáticos y otras actividades afectadas no podrán evitar su cierre si de forma inmediata no les llegan ayudas directas y medidas fiscales que alivien su situación financiera de forma urgente.